Maglione no existe, visítela.

Algún tiempo atrás, apareció en la red social del odio #Twitter un “hashtag” una tendencia, muy particular, #CatamarcaNoExiste. Intentar ensayar la explicación de un chiste o de una ironía, aburre tanto al escritor como al lector, a la ves que es un imposible. La cuestión es que la cuenta de Turismo de Catamarca, entendiendo todo, respondió (no cito textual) “Catamarca no existe, ah re que si, los invitamos a conocerla”. Repito: entendiendo todo lo que hay que entender, y que es imposible de explicar.Lo que también es imposible, es que un pequeño pueblo de agricultores del norte de Italia llamado

Deuda y existencia: el arte de vivir

ensar una suerte de novedad respecto de la deuda y del arte no dependerá de cada uno de los conceptos, sino de cierto modo de relación que se establece entre estos. Del primero, se distingue a priori un terreno de posibilidades: definir deuda parece menos engorroso que precisar a través de la significación un dictamen sobre el arte. Sin embargo, sugiero que el lector no se desentienda de los consensos sociales, si es que así pueden llamarse, a los que se ha arribado en un intento de amordazar sus cualidades en la sintaxis. Cierto estatuto de imposibilidad, dado en una

La marca de la gorra – Andén 90

El arte se lleva mal con el orden. Desde que Platón impugnó a los poetas en el gobierno de la polis, los creadores –cualquiera sea su especificidad– siempre han sido mirados con desconfianza. Por eso Andén va hacia las fuentes y le pregunta a un artista callejero cómo es vivir bajo la mirada atenta de las fuerzas de seguridad y la mirada autoritaria de quienes consideran que expresarse en el espacio público es una suerte de ejercicio del terror.

El síndrome de Stendhal – Andén 87

Es la reacción psicosomática de una persona que resulta expuesta a cantidades inconmensurables de belleza, sobre todo en museos o galerías de arte. Lleva este nombre en honor al reconocido autor francés, quien habría padecido por primer vez el síndrome cuando viajó a Florencia en 1817 y estuvo cara a cara con un Botticelli. No existe aún tratamiento o terapia alguna.
Síntomas: taquicardia, depresión, vértigo, desmayos, aturdimiento, alucinaciones.
Causas: estrés, traumas infantiles, desequilibrio hormonal, represión de recuerdos.

Vivir sin los padres, dilema del metal criollo – Andén 87

Recientemente vi El ciudadano ilustre, filme de Duprat y Cohn que retrata tan bien (quizás, sin quererlo) la mutación cultural de un artista. En la película, Daniel Mantovani (con algunos guiños hacia Aira, sin duda alguna) es un escritor argentino que gana el premio Nobel. Hastiado de su vida burguesa en Barcelona, decide salir de ese estado post mortem y aceptar la invitación que le hace la municipalidad de su pueblo Salas, en Buenos Aires, para condecorarlo con la medalla de “ciudadano ilustre”.

Entre tu arte y mi arte – Andén 87

Y Catinga en su juventud decide ser artista pero le chinga de ciudad y en lugar de serlo en Florencia lo es en el conurbano. Entonces para no quedarse a medio camino entre la gloria universal y la nada misma dibuja en el pupitre del colegio, en el respaldo del asiento de colectivos inmundos y en fanzines punks de bandas reventadas que ya no tocan porque el cantante se les murió. De ahí su fama de artista maldito y antihéroe, de su vocación por exponer en galerías tan medio pelo como esta revista.

Resistir desde el Heavy – Andén 85

Reflexionar sobre los movimientos culturales desde una visión de resistencia nos hace optar y tomar posición debido a que estos movimientos ingresan al plano de la política. Ya no podemos seguir viéndolos como pulcros y neutros. Se ensucian con la realidad que los rodea. Ahora bien, si vamos a referirnos a resistir, primero tenemos que ponernos de acuerdo sobre de qué hablamos cuando hablamos de resistencia, quiénes resisten, contra qué se resiste y de qué manera se puede resistir.