La sociedad ha llegado a un punto en el que internet la ha invadido completamente. Por lo tanto, considero que no tiene sentido hacer pronósticos apocalípticos sobre cuáles serán los costos que se deberán pagar en pos del beneficio de estar hiperconectados, debido a que esto ya es una realidad de la cual es muy difícil que se vaya a volver atrás. Más bien deberíamos reconciliarnos con la red y reconocer las posibilidades que esta tiene, que son infinitas, y buscar la manera de que esta sea una buena herramienta y complemento en los estudios y no solo una herramienta para el ocio y el entretenimiento.