Algún tiempo atrás, apareció en la red social del odio #Twitter un “hashtag” una tendencia, muy particular, #CatamarcaNoExiste. Intentar ensayar la explicación de un chiste o de una ironía, aburre tanto al escritor como al lector, a la ves que es un imposible. La cuestión es que la cuenta de Turismo de Catamarca, entendiendo todo, respondió (no cito textual) “Catamarca no existe, ah re que si, los invitamos a conocerla”. Repito: entendiendo todo lo que hay que entender, y que es imposible de explicar.Lo que también es imposible, es que un pequeño pueblo de agricultores del norte de Italia llamado