Pocos inventos han definido tanto nuestra época cultural como la aparición de los televisores. Su avance implacable, desde ocupar el lugar central de nuestros hogares (un living, un comedor) a ocupar un espacio en todos los lugares de nuestros hogares y vidas (habitaciones, patios, baños, y una lista interminable de etc.), ha sido vertiginoso e incuestionable y no hay hoy prácticamente un espacio, un momento o una situación que no puedan ser imaginados con la presencia permanente e impasible de un televisor encendido.
El síndrome de Stendhal – Andén 87
Es la reacción psicosomática de una persona que resulta expuesta a cantidades inconmensurables de belleza, sobre todo en museos o galerías de arte. Lleva este nombre en honor al reconocido autor francés, quien habría padecido por primer vez el síndrome cuando viajó a Florencia en 1817 y estuvo cara a cara con un Botticelli. No existe aún tratamiento o terapia alguna.
Síntomas: taquicardia, depresión, vértigo, desmayos, aturdimiento, alucinaciones.
Causas: estrés, traumas infantiles, desequilibrio hormonal, represión de recuerdos.