El pasado mes de mayo, México y el mundo fueron testigos de una de las vociferaciones políticas de más alta intensidad de los últimos tiempos: Marcos, el vocero de los zapatistas, ha declarado su propia muerte. Es decir, que aprovechando la oportunidad de anunciar el carácter ficcional de su personaje, nos notificó sobre su muerte. Muerte, también, ficcional (o no).
Licencia social para matar: El conflicto entre el capitalismo y la supervivencia de las especies – Andén 66
Famatina. La historia no es una, el desarrollo no es uno, el saber no es uno; en fin, el futuro deseable y pensable no es uno. La puerta debe abrirse a la aceptación de lo múltiple y para ello, habrá que darle a las resistencias el rol propositivo que merecen.