En la Ciudad de Buenos Aires, a principios del siglo XX, se construyó la primera línea de trenes subterráneos movidos por electricidad. Esta declaración describe sucintamente la Ciudad que teníamos como capital de la Argentina, inscripta en el modelo de desarrollo que impuso la generación de los ochenta: Buenos Aires debía ser la París de Sudamérica y, en función de esto, se gestionaba y se construía.
Subí que no te llevo
Bajo las escaleras de la estación de subte, Loria, como lo hago cada día. Como cada día, cuando estoy llegando al andén, se va el tren. Así que aprovecho y recargo mi subtecard.