De los quinientos y poco diputados federales electos el 3 de octubre pasado en Brasil, hay apenas uno que aún no encargó el traje que estrenará el día de su juramentación. Su nombre es Francisco Everaldo Oliveira Silva y a pesar de haber recibido más de un millón trescientos mil votos, en una de esas se queda de este otro lado del Olimpo. a notoriedad de este caso viene dada por algunos elementos que comenzamos a desandar. El primero, que este ciudadano fue el candidato a diputado que tuvo la votación más alta en estos comicios y ya en el