Una colaboración de un pasajero en el Andén, a la espera del tren de la historia. Una pequeña reflexión en tono poético sobre algunos avatares nacionales.
La del caparazón vacío, el de la gilada,
A la que sólo le quedan ríos, mares y oceánicas batallas de verborragia con promesas de un próximo bienestar que nunca llegará. La otra es la de los megaproyectos, donde un extranjero compra todas las tierra baratas del país en pesos y luego las vende en dólares a un precio varias veces superior, obteniendo una ganancia exorbitante. Es una forma de expropiación territorial, los nacionales ya no pueden comprarlas de nuevo, sólo los de afuera que tienen dólares. Ese extranjero cebado en su fácil ganancia, Se le ocurre un megaproyecto para construir Un country flotante, sólo para ricos en dólares no es un megaproyecto habitacional para erradicar las villas miserias Hay muchos megaproyectos solo para los ricos únicamente. No hay un megaproyecto para encontrar petróleo Y gas, de proteger la salud de las aguas de nuestro territorio, de construir escuelas, hospitales, ciencia y tecnología, empresas constructoras estatales, fabricas e industrias estatales, porque lo que no se construye luego no se puede producir. Mientras el estado este ausente, y se dedique sólo A distribuir los ingresos fiscales, en la patria Financiera, y en la patria contratista , a la gilada solo le queda el cascaron vacío. La pregunta del millón es ¿Hasta cuándo funcionara esta calesita?■ |