Latinoamérica – Editorial – Andén 30

Ahora podemos decirlo: después de amagar y amagar –como el Burrito Ortega en su época de esplendor– logramos hacer una parada en América Latina. Una introducción, un avance a tientas, concientes de nuestras limitaciones; abordar semejante empresa en apenas doce páginas sería, al menos, ridículo. No obstante, quisimos –queremos– comenzar una tentativa de análisis, una aproximación para poner en cuestión tantos lugares comunes y tantas falacias que se expresan sobre los procesos políticos de los países vecinos. Abordar críticamente una realidad tan pero tan compleja es un desafío por demás interesante. Es apasionante. Tenemos una historia en común con los países vecinos muy rica –tantos padecimientos, tantos avasallamientos, tantas resistencias– y una serie de rasgos culturales compartidos –como la música, la danza, la comida, la literatura– que son imposibles de ignorar…

¿Chile a la Derecha? – Editorial – Andén 29

Esta nueva parada tiene un aditamento especial: hubo un cambio de maquinista. En realidad, es un simple cambio de roles, ya que la intención es mantener los lineamientos básicos con los que se trabaja desde hace un poco más de un año. Fue una decisión consensuada, con la idea de lograr –en un plazo no establecido– una ampliación de la participación con el objetivo de lograr una evolución cualitativa. Esperamos lograrlo…

Pagar deuda, ¿En qué categoría política entra? – Andén 28

Ante tanta autoproclamación es necesario preguntarse si no es pertinente hacer una distinción entre dos categorías políticas que son utilizadas como sinónimos: progresismo y centro-izquierdismo. La crisis del Banco Central y las posturas sobre la deuda pública –aprovechando la ocasión para hacer una breve reseña– pueden ser útiles para la distinción.

Diálogo con Julio Alfonsín- «El vecino vive momentos de mucha alegría y de plenitud.” – Andén 27

Esta semana ANDÉN dialogó con Julio Alfonsín, ex legislador de la Cámara baja bonaerense e impulsor de la ley mediante la cual se dividió el distrito de Chascomús y se creó el de Lezama. En un gesto de humildad y honor, Alfonsín se trasladó hasta nuestra ciudad con el único fin de responder nuestras inquietudes. Nos encontramos con un hombre que, pese a toda la seguridad con la que defiende su proyecto, no se reconoce como un ganador ni anda con actitudes de zozobra, sino que –por el contrario–, se apasiona por sus ideales, defiende la convicción de su pueblo, reniega de que el conflicto dirigencial pueda tener eco en la relación comunitaria y responde los fuertes cuestionamientos que se presentan en lo que queda del distrito.