Oficialismo y hegemonía – Andén 49

Hace unos meses, una amiga tenía que hacer un trabajo práctico. Tomar las fortalezas y las debilidades de un candidato. Eligió a Pino Solanas. En el intercambio empezamos a notar que había un problema: la edad del cineasta, 74 años; casi la misma edad que Yrigoyen y Perón cuando asumieron sus últimas presidencias. Empezamos a hablar de la debilidad que eso le generaba a su construcción política.

Facebook, Twitter y política – Andén 48

La política contempla una puesta en común que va más allá de las redes sociales, porque no se agota ahí. Las redes tienen una dinámica efímera. Se pasa de una información a otra en cuestión de segundos. Es al revés de las construcciones políticas, que son más lentas, que requieren un marco de acuerdo, una discusión sobre las acciones a futuro y sobre los marcos programáticos.

El Estado, las desigualdades y la despenalización – Andén 34

Las estadísticas educativas muestran tendencias que deberían ser atendidas por el Estado: la deserción escolar de las mujeres que fueron madres, la cantidad de hijos de las familias de menores recursos y la baja edad promedio de las madres primerizas. La baja inversión estatal en planes de educación sexual agrava el panorama. Qué se debería tener en cuenta en la discusión sobre la despenalización del aborto.

Políticas Sociales – Editorial 31

El señor Perogrullo podría haber dicho que es más fácil demoler un edificio que reconstruirlo. Nadie hubiera estado en condiciones de contrariarlo. A lo sumo, con algún gesto de desdén hubiese apuntando con el dedo la pantalla del televisor que contenía la imagen de un gran demoledor: Carlos Saúl Patillas. El golfista amateur que evitó el quórum opositor para satisfacer su ego es el mejor exponente. Él y Cavallo, en la apoteosis del credo neoliberal, fueron los artífices de la desarticulación del Estado, retirándolo en sectores claves y necesarios para aplicar políticas sociales en favor de los sectores vulnerables de la sociedad. Profundizaron el problema e intentaron resolver los problemas con dos soluciones que se complementaron: la represión –recordemos los sucesos de Cutral-Có– y el clientelismo.