Televisión, arte y realidad: ¿El Triángulo de las Bermudas? – Andén 53

La televisión es uno de esos inventos que llegaron como una explosión. Ha modificado desde su invención hábitos, modos de percepción, tanto de lo real como del arte y usos de la imagen, van aquí algunas pistas para tratar de comprender cómo se construye la relación televisión – espectador y un repaso del vínculo de este dispositivo con el arte. ¿Complejo? Sí. ¿Problemático? También ¿Imposible?… No.

Producción y reproducción del sin-sentido común – Andén 53

La colonialidad hunde sus raíces en nuestro sentido común, y desde allí germina, lenta, hasta ofrecer los amargos frutos que luego, la mayoría de las veces, recogen los grandes medios de comunicación para alimentar nuestro insaciable apetito de realidad. Las operaciones mediante las cuales, sobre todo los informativos, producen y reproducen las condiciones y los condicionamientos propicios a las más variadas y sutiles formas de dominación y justifican las muchas maneras de la desigualdad son numerosas. Aquí nos detendremos, sucintamente, en una de ellas.

La pobreza en vivo y directo – Andén 53

L[a ocupación temporaria del Parque Indoamericano que aconteció recientemente desnudó el problema de la vivienda y la cuestión de la tierra de un modo sopresivo, violento e indisimulable. Pero también evidenció las particularidades de las transmisiones televisivas que cubrieron dicho acontecimiento con una nitidez que dejó al descubierto su trasfondo ideológico, económico y cultural.

Esa linda cajita boba para interpretar – Editorial 53

En épocas de video-política no nos queda más que juzgar a la televisión como médium omnipresente entre lo comunitario y lo individual. Nuestra relación con los hechos sociales hace tiempo que dejó de ser de cuerpo presente. Asistimos al foro público colocándonos frente a la pantalla. Desde allí damos o quitamos nuestra aprobación, abonamos la ilusión de participar de un proceso social enjuiciándolo con un mero clic al control remoto.

El periodismo murió – Exclusivo Web

Me volví a meter de lleno en la filosofía, me dediqué con una pasión renovada a la literatura y a la poesía, sin volver a leer un diario, ver un noticiero, escuchar una radio. Hasta que hoy volví a escribir. Si no podía escribir sobre la realidad, si no podía reflexionar y pensar en ella, no quedaba más que reflexionar sobre esa imposibilidad.