Terrorismo en la vida cotidiana. Vidas marginales y precariedad totalitaria – Andén 90

En mi corta vida de escritor, no recuerdo un tiempo donde el acto de escribir tuviese gusto a tan poco. Ahí fuera la cosa no para de oscurecer, pero oscurecer en serio; es decir, más allá de lo económico y del bolsillo apretado. Uno sale a la calle, copa con miles de cuerpos las plazas y las avenidas y la respuesta es solo una: el endurecimiento de las fuerzas represivas, el incremento de la violencia estatal, el reforzamiento de una doctrina del miedo a base de persecusion y amenazas. Y claro, ante todo eso, uno se pregunta: ¿Qué pueden hacer las palabras? ¿Para qué seguir escribiendo?

Notas sobre terror y territorio – Andén 90

En ocasiones conviene explicitar enunciados que parecen obvios, pero cuya misma obviedad se ve empantanada en el fango de los medios que reproducen discursos tendenciosos. Ante el inmenso caudal de libros sobre el concepto de terrorismo y, específicamente, terrorismo de Medio Oriente, este artículo se propone reforzar una premisa que no por sencilla deja de ser vital: las sociedades de los supuestos países terroristas son quienes en verdad conviven día a día con el terror, lejos de ser solo la plataforma de la cual parten los ataques a occidente.

Horror, terror y terrorismo – Andén 90

La similitud con la que se usan estos términos podría esconder la posición en la que el sujeto es afectado o afecta a los otros. El horror puede ser pensado como una emoción que altera vía el miedo, la conciencia. La cuestión psicológica del horror es bien simple, y se la puede resumir en la exposición a un fenómeno que deja al sujeto un poco más allá de sus posibilidades de procesamiento.

La gran trama de corazones – Andén 90

Un atentado que cruje entre las palabras de los actores de una obra de teatro, en una sala de teatro repleta de espectadores. En ese crujir de palabras y sensaciones que se agolpan en el espacio, el atentado, firme como una mano que aprieta el puño, expande su propósito y rompe y enmienda, y enmienda y rompe. Este acto tiene, para mí, un nombre y un movimiento “intentos desmedidos por dejar una huella”.

La marca de la gorra – Andén 90

El arte se lleva mal con el orden. Desde que Platón impugnó a los poetas en el gobierno de la polis, los creadores –cualquiera sea su especificidad– siempre han sido mirados con desconfianza. Por eso Andén va hacia las fuentes y le pregunta a un artista callejero cómo es vivir bajo la mirada atenta de las fuerzas de seguridad y la mirada autoritaria de quienes consideran que expresarse en el espacio público es una suerte de ejercicio del terror.

El terror por otros medios – Editorial 90

Vivimos una edad del mundo en la que el terror social y sus artífices han cobrado nuevos bríos. No es que antes hubiera desaparecido, como se postuló luego de la caída del muro de Berlín y la consecuente pax norteamericana que, al fin de cuentas, duró menos que un suspiro. Desde que el mundo es mundo, aterrorizar a otros es una herramienta para dominar, para conseguir que los otros den lo que de otro modo no darían. Una herramienta acaso menos sutil que otras, pero herramienta al fin. Una bomba por aquí, un atentado por allá para que algunos se asusten y recuerden que siempre hay disconformes capaces de pasar a mayores, si se les da la oportunidad.