Edición limitada y convaleciente: Hitazos pum para arriba – Andén 42

Ayer mismo, mientras trabajábamos en una clase de piano, la primera de las Gymnopédies de Erik Satie, traté inocentemente de entusiasmar a mi alumno diciéndole que esta piecita es buenísima para levantar alguna minita. “Tocate una que sepamos todos” le van a decir en alguna velada festiva con piano incluido; y él, impávido, va a conquistar una damisela interpretando esta preciosa obra. Recordé entonces, que cuando tenía algunos años menos de los que tengo ahora, tocaba a cuatro manos la Danza húngara Nº 5 de Brahms con otro pianista -que en aquella época se ganaba el pan tocando música funcional al piano en un resto-bar-teatro muy cool del barrio de Almagro/Palermo/Recoleta-; recordé además, que cada vez que tenía ganas de recibir unos aplausos sin demasiado esfuerzo, me apersonaba en el citado bar de la calle Mario Bravo para enardecer a las masas con este hitazo de la música clásica.

Sueños de la Patria Grande

Anoche tuve un sueño: golpearon a mi puerta; no lo podía creer; era Simón Rodríguez, el maestro de Bolívar. Me dijo: –Afuera llueve y hace mucho frío. Y yo le respondí: –Claro, pasa o pase– no lo recuerdo bien. Usaba un traje raído, un lazo en el cuello y sus anteojos sobre la frente (cuenta la leyenda que cuando Don Simón no leía o escribía solía usar sus anteojos en la frente). Estaba preocupado porque en la Ciudad de Buenos Aires había encontrado muchas familias durmiendo en la calle. –Y pensar que yo quería incluir y formar en las Escuelas de la Patria a los cholitas y las cholitas que ruedan en la calle– me dijo –En los niños pobres está la Patria.

Diálogo con Sabrina Lamperti – «La historia del País es la suma de las historias de cada familia que la compone» – Andén 42

Sabrina Lamperti tiene 26 años, es abogada y trabaja en el Ministerio Público Fiscal de la Provincia de Buenos Aires. En su tiempo libre, se dedica a la investigación de historias familiares. Es co-autora de la saga familiar de «Los Arze y los Arce» junto a Raine Golab y co-administradora de grupos de genealogía como ArgenGen y GenSurGBA. Hoy se sube al tren para hablarnos de los archivos que custodian la memoria de nuestras raíces.

5 discos 5 para Freud que nos mira por TV – Andén 41

La expresión en algún punto es fallida. No hay salud mental posible. ¿Cuál es el criterio? ¿Cuál es la piedra de toque que delimita el lado de la taba en el que lo real es lo real y el delirio una mentira? No lo sabremos nunca. Con todas nuestras ciencias sólo atinamos a guiarnos por las convenciones que introyectamos junto a la leche materna, los tabúes y los miedos. A lo sumo, con suerte, dolor y griterío de por medio, conseguimos sospechar de ese castillo de naipes que es el yo y lo apuntalamos con dudas. Nada más.

El negro mar de la colonialidad – Llorar sobre el petróleo derramado – Andén 41

«Estaban todos los árboles verdes y llenos de fruta, y las yervas todas floridas y muy altas, los caminos muy anchos y buenos; los ayres eran como en abril en Castilla; cantava el ruyseñor…”. Así escribía Colón en su diario personal de viajes, el 13 de Diciembre de 1492. Maravillado por lo que pensaría como Paraíso Terrenal, luego finalizaría la nota enfatizando: “Era la mayor dulçura del mundo. Las noches cantavan algunos paxaritos suavemente, los grillos y ranas se oían muchas…”. Colón había llegado al Caribe, esos trópicos adyacentes a lo que hoy conocemos como el Golfo de México, y cuyas aguas, clima y viento tropicales comparten ambos.

Diálogo con Ximena Goldberg Hermo – «El “loco” es una identificación pasada de moda» – Andén 41

Licenciada en Psicología en la Universidad de Buenos Aires y Máster en Neurociencias, luego de haber trabajado como coordinadora psicológica en el Frente de Artistas del Borda y completado la Residencia en Psicología Clínica en el Hospital B. Moyano; se dedicó a la investigación sobre las causas de la “esquizofrenia” en diversos países del mundo. Hoy reside en Barcelona y decidió subirse al tren para compartir con nosotros sus percepciones y experiencias.