«El cuerpo es como un puro espíritu: se contiene por entero a sí mismo y en sí mismo, en un solo punto. Si se rompe este punto, el cuerpo muere. Es un punto situado entre los dos ojos, entre las costillas, en el medio del hígado, todo alrededor del cráneo, en plena arteria femoral, y aún en muchos otros puntos. El cuerpo es una colección de espíritus.” Jean-Luc Nancy, 58 Indicios sobre el cuerpo
Inseguridad: ¿sensación?, ¿para quién? – Andén 56
En todo lo que comienzo a garabatear a través de la escritura encuentro una palabra a la que puedo llamar “anzuelo” y es aquella que me atrapa y ahí comienza el desborde de las que le siguen. Es como gente amuchada esperando entrar en algún lugar y de repente la puerta se abre. En este caso la palabra es “inseguridad”. Y este anzuelo sabe mal. Es una palabra que solo vinculo a cosas que hacen temblar.
Crónica umbilical
Apenas pisé el suelo de Los Beatles, de Shakespeare, de la princesa Diana y su Carlitos, de nuestros enemigos en la guerra cachivache (como todas) que podemos llamar “contemporánea”, di lugar a mi primera asociación libre y completamente ilícita: sentí que estaba en alguna parte de la costa atlántica, mas precisamente Pinamar. ¿Por qué me fui a aquellas playas? Supongo que porque en ellas veraneé muchos años hospedada en el departamento de mi amiga Dana y porque era allí donde me sentía como en casa (con la familia de mi amiga, con mi amiga, con el mar, mi adolescencia a un micro de distancia de mi cama y mis petates), pero de vacaciones (es decir, mil veces mejor). En ese momento, ante tanta extrañeza, ante tanto océano cruzado, ante tanta velocidad, necesitaba creer que conocía aquel país que era completamente ajeno para no querer esconderme debajo de una cama.
Reseña sin tiempo
Este cuento nace en 1922 con Anna. Vive en mí finitamente y de ustedes dependerá, lectores, que sea inmortal.
Outside
Siempre recibía el catálogo, pero ese día el encuentro fue algo sobrenatural, hito arqueológico. Allí estaba la publicidad de la heladera inteligente última generación, con gavetas de opción programables digitalmente para determinar días y horarios en que podían ser abiertas, convirtiendo al artefacto en un aliado en el cuidado de nuestra silueta y salud. Había leído en la página web de la fábrica en Australia que un reciente estudio realizado en Vancouver demostraba que los microorganismos, que lo habitan absolutamente todo (incluyendo nuestra comida) al ritmo del britpop, por un proceso de regeneración celular favorecían la reproducción de partículas que son beneficiosas para el hombre cuando las ingiere. Esta maravilla del no frost incluía, por supuesto, la música funcional que alegraría a los bichitos de mis alimentos.