Todos somos vagones del mismo tren – Andén 90
Una banda proveniente del conurbano con casi treinta años de trayectoria nos demuestra que puede pensar las diferentes problemáticas latinoamericanas desde la visión de los sectores más postergados y marginados. Al ritmo veloz, potente y agresivo del Thrash Metal, aborda la cuestión de la violencia con el lenguaje directo y de denuncia que caracteriza a aquel subgénero del Heavy Metal.
Hollywood. El terrorismo visto a través del cine – Andén 90
Es conocido el estado de alerta que vivió el mundo entero hace ya una década y media luego de los atentados terroristas a las Torres Gemelas. El fantasma del terrorismo sacudió a occidente y sobrevoló sobre su civilización con atentados en Estados Unidos, Londres y Madrid. No ajeno a estos lamentables ataques, el cine se dispuso decidido a adentrarse en un terreno difícil, con los riesgos de generar más de una controversia en cuanto a los efectos que esto podría tener, teniendo en cuenta lo sensible que puede resultar a cierto sector de la humanidad, notoriamente afectada por los hechos, aún muy recientes en términos históricos.
Hacia un feminismo terrorista – Andén 90
¿Qué tan inmoral es pensar en la posibilidad de un feminismo que, en ocasiones y organizado, pueda ejercer mecanismos terroristas?
Derribemos las vallas – Andén 90
Un sistema, sus métodos de permanencia. El principal escollo para superar esta tragedia, ¿está en el sistema o en lo que nos queda libremente de nosotros mismos? ¿Tenemos obligación de tomar la pastillita de “Un mundo feliz”, ponernos el inhibidor de sueños de “Visionarios” o podemos negarnos?
Hegemonías y la construcción del otro como enemigo público – Andén 90
Argentina es un país de soluciones, históricamente lo es, porque ha logrado plantear soluciones a las dicotomías de la modernidad: su más grande solución fue la invención del “Peronismo”, el ejemplo por excelencia. Las reglas del juego son la modernidad (Liberté, égalité, fraternité), el estado nación y las instituciones en orden jerárquico, los sistemas de producción hegemónicos y los modelos obligatorios que garanticen el orden en favor de “minorías privilegiadas” (aquellas por las que se exaltaba Fukuyama en detrimento de las mayorías).
Alarmas en la escuela – Andén 90
“Alarma por un juego para invocar espíritus que practican alumnos y se extiende en las escuelas. Provoca cambios de conducta y hasta autolesiones” tituló Diario Popular en su tapa de un sábado. Se refieren sin dudas a los festivales comunitarios de la Escuela 15 DE 13, en Villa Lugano, CABA: invocaciones infantiles de los espíritus del carnaval, el Inti Raymi y toda fiesta popular, donde se ven importantes cambios de conducta y danzas rituales entre harina y patinetas.
Melodías de la violencia. El metal patagónico y la “conquista del desierto” – Andén 90
Marca de época, la palabra devaluada. La hiperinflación de mensajes circulantes pareciera acumular significados hasta volver una pregunta sin respuesta posible qué se dice cuando se dice el significante. Como una maldición, Humpty Dumpty salta de este lado del espejo y se multiplica. Pulula. Lo adivino detrás de ellos. Se me hace ahí cuando impostan su voz imitando a gurúes berretas de la motivación. Cuando invitan con sonrisas diáfanas y colores claros a la tolerancia y el respeto mientras debajo de la mesa desatan el bozal del perro rabioso, que babea y se relame porque olfatea sangre. Una frase que ya no tiene, porque es de las paredes y las banderas y la calle, dice que eso es mentir y que mentir es violencia.
Ecoterrorismo – Andén 90
¿Se acuerdan del Capitán Planeta? Ese azulado personaje de los noventa a quien podía convocar un grupo de jóvenes de distintas partes del mundo gracias al uso de unos anillos mágicos otorgados por Gaia, el Espíritu de la Tierra. Un groso mal. El protagonista de una caricatura que, como muchas de una época en que todavía creíamos en la existencia de la moral, no se encargaba tan solo de entretener, sino también de informar sobre los daños que ejerce la mano del hombre en el medio ambiente. Un héroe que incluso nos empoderaba: «el poder es tuyo», era su frase de cabecera.
Más terror por favor – Andén 90
Me resulta difícil realizar una retrospectiva sobre la obra de Ishiguro (nobel 2017) pues la mayor parte de sus libros no los he leído; lo que sí puedo y quiero hacer es contar las primeras sensaciones de su libro Nunca me abandones, el cual sí leí y releí en varias ocasiones.
Plan maestro: terrorismo en la educación – Andén 90
Reflexionar sobre la educación en el contexto en el que vivimos resulta una tarea obligada, especialmente para quienes trabajamos en la comunidad educativa, de pensar, y repensar: ¿cuál es el papel de la educación en este contexto histórico? Particularmente me refiero al proceso político, económico, financiero, jurídico, militar, mediático, etc., que estamos atravesando en la región, en Argentina y en otros países latinoamericanos. Estos desplazamientos geopolíticos merecen nuestra particular atención, porque nos atraviesan en todas las esferas de nuestras actividades sociales y culturales, especialmente en la educación.
Terrorismo en la vida cotidiana. Vidas marginales y precariedad totalitaria – Andén 90
En mi corta vida de escritor, no recuerdo un tiempo donde el acto de escribir tuviese gusto a tan poco. Ahí fuera la cosa no para de oscurecer, pero oscurecer en serio; es decir, más allá de lo económico y del bolsillo apretado. Uno sale a la calle, copa con miles de cuerpos las plazas y las avenidas y la respuesta es solo una: el endurecimiento de las fuerzas represivas, el incremento de la violencia estatal, el reforzamiento de una doctrina del miedo a base de persecusion y amenazas. Y claro, ante todo eso, uno se pregunta: ¿Qué pueden hacer las palabras? ¿Para qué seguir escribiendo?
Notas sobre terror y territorio – Andén 90
En ocasiones conviene explicitar enunciados que parecen obvios, pero cuya misma obviedad se ve empantanada en el fango de los medios que reproducen discursos tendenciosos. Ante el inmenso caudal de libros sobre el concepto de terrorismo y, específicamente, terrorismo de Medio Oriente, este artículo se propone reforzar una premisa que no por sencilla deja de ser vital: las sociedades de los supuestos países terroristas son quienes en verdad conviven día a día con el terror, lejos de ser solo la plataforma de la cual parten los ataques a occidente.
Horror, terror y terrorismo – Andén 90
La similitud con la que se usan estos términos podría esconder la posición en la que el sujeto es afectado o afecta a los otros. El horror puede ser pensado como una emoción que altera vía el miedo, la conciencia. La cuestión psicológica del horror es bien simple, y se la puede resumir en la exposición a un fenómeno que deja al sujeto un poco más allá de sus posibilidades de procesamiento.
La gran trama de corazones – Andén 90
Un atentado que cruje entre las palabras de los actores de una obra de teatro, en una sala de teatro repleta de espectadores. En ese crujir de palabras y sensaciones que se agolpan en el espacio, el atentado, firme como una mano que aprieta el puño, expande su propósito y rompe y enmienda, y enmienda y rompe. Este acto tiene, para mí, un nombre y un movimiento “intentos desmedidos por dejar una huella”.
La marca de la gorra – Andén 90
El arte se lleva mal con el orden. Desde que Platón impugnó a los poetas en el gobierno de la polis, los creadores –cualquiera sea su especificidad– siempre han sido mirados con desconfianza. Por eso Andén va hacia las fuentes y le pregunta a un artista callejero cómo es vivir bajo la mirada atenta de las fuerzas de seguridad y la mirada autoritaria de quienes consideran que expresarse en el espacio público es una suerte de ejercicio del terror.
El terror por otros medios – Editorial 90
Vivimos una edad del mundo en la que el terror social y sus artífices han cobrado nuevos bríos. No es que antes hubiera desaparecido, como se postuló luego de la caída del muro de Berlín y la consecuente pax norteamericana que, al fin de cuentas, duró menos que un suspiro. Desde que el mundo es mundo, aterrorizar a otros es una herramienta para dominar, para conseguir que los otros den lo que de otro modo no darían. Una herramienta acaso menos sutil que otras, pero herramienta al fin. Una bomba por aquí, un atentado por allá para que algunos se asusten y recuerden que siempre hay disconformes capaces de pasar a mayores, si se les da la oportunidad.